Te saludo desde mi corazón,
Hace unos meses atrás fue el partido Colombia-Perú por las eliminatorias al mundial. Cuando me disponía a verlo, me pidieron que llevara a un familiar a su casa porque no lograba conseguir taxi. Esto no estaba dentro de mis planes, eran las 5:55 pm y el partido comenzaba a las 6:30 pm. Esta salida suponía una gran probabilidad de llegar tarde a ver el partido porque era la hora pico y mucha gente estaba intentando llegar a su casa para verlo.
En ese momento decidí cerrar mis ojos, tomar varias respiraciones en consciencia, conectarme desde mi corazón e ir con buena actitud a llevar a mi familiar a su casa. Al hacer esto, sentí confianza y la certeza interna que todo se iba a dar de la mejor manera para ella y para mi.
En uno de los semáforos, el carro que estaba en frente mío tenía una placa con número 545 y en ese momento recordé que según los códigos sagrados, ese número representa “un regalo inesperado del universo”, así que al reconocerlo se reforzó la confianza y la certeza dentro de mi. Tomando esto como una señal del universo, comencé a hacer el código 545 con la intención de llegar a mi apartamento antes de que el partido comenzara. Al hacerlo, entré en un estado de tranquilidad y amor profundo. Al mismo tiempo que repetía el código, yo agradecía de antemano al universo por este regalo que él me estaba anunciando.
¿Cómo terminó todo?
Llegué a mi apartamento a las 6:30 en punto y cuando subía por el ascensor se cortó la electricidad, y a pesar de esto, el ascensor nunca se detuvo. Así que pude ver el partido sin ningún problema.
Esta fue una gran experiencia que me dejó varios aprendizajes:
¡Si yo lo pude hacer, tú también lo puedes hacer!
Gabriel Francisco
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