Te saludo desde mi corazón,
¿Existe realmente el tiempo? ¿Es una ilusión o una realidad?
El tiempo no existe, es una ilusión con sentido: el de poder experimentar el amor a través de él. ¿Cómo más podríamos reconocer que somos la “paciencia” si no es a través del tiempo?
En nuestra realidad espiritual solo existe el eterno presente, el tiempo es uno solo: ¡el ahora! Así que el tiempo es un producto de nuestra mente y es una de las tantas herramientas de las cuales disponemos para experimentar el amor a través del contraste.
¿Alguna vez te has sentido esclavo del tiempo? Incluso, puede que tengas la percepción que el tiempo no te alcanza para todo lo que necesitas hacer. ¿Cómo te sientes cuando no te alcanza el tiempo? Las emociones que tienes bajo esta percepción subjetiva del tiempo, son las que te van a poner en contexto con esa expresión del amor que tu alma está intentando experimentar a través de esta ilusión.
Hay una palabra que pasa desapercibida en la percepción subjetiva del tiempo y que devela que el tiempo es una ilusión. Esta palabra es la necesidad. La necesidad no viene del alma sino del cuerpo y de la mente. Cuando hablamos de necesidad estamos en la carencia, en algo que no tenemos. Y la carencia hace parte de esta ilusión a la que llamamos vida: necesitamos oxígeno para vivir, necesitamos sentirnos seguros, necesitamos libertad, etc. La necesidad es la expresión del miedo a no tener, es decir, a la escasez. En cambio, en la realidad del amor solo existen la certeza y la abundancia. Así que cuando sientes que tienes poco tiempo, es la ilusión que te está invitando a reconocer el amor que eres (ej. “Yo Soy la paciencia”).
Como en cualquier otra situación que vives, siempre hay dos caminos para experimentar el amor: el camino de la experimentación directa y el camino de la experimentación a través del contraste. Respecto al tiempo, estos dos caminos son: vivir el “ahora” o vivir en la fantasía del tiempo. Cuando vives en el “ahora”, estás conectado con el amor. Cuando vives en la fantasía del tiempo, estás en muchos lugares menos en el momento presente. Por esta razón, si deseas conectarte con el amor que eres, regresa a tu corazón y hazte presente aquí y ahora.
¿Alguna vez has imaginado cómo sería volver a ti y hacerte presente en el ahora? ¿Y cómo sería si habitaras tu corazón de manera consciente? Si quieres salir de la ilusión y regresar al amor que eres, este es el camino para lograrlo.
¡Te saludo desde la presencia presente que habita en mi corazón!
Gabriel Francisco
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