La pasión del Fútbol es la pasión del Espíritu

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14 junio 2018/ 1973 / 4

Te saludo desde mi corazón,

 

Hoy comienza el mundial Rusia 2018 y millones de personas se reúnen alrededor del fútbol para celebrar la pasión y la alegría de este juego. Que esta sea una oportunidad para experimentar el amor y la alegría de estar vivos.

 

El fútbol es un juego que genera pasión y eleva el espíritu a su máxima expresión. Por su parte, la espiritualidad es el juego que ha creado el alma para experimentarse a si misma y recordar el amor que ella es. Y hay un elemento común en ambos juegos: el amor. ¿Te imaginas cómo sería el fútbol si no existiera el amor por este juego? ¿Te imaginas cómo sería la espiritualidad sin la experimentación del amor?

 

Te invito a que hagamos un paralelo entre lo que es el fútbol y lo que es la espiritualidad:

 

El protagonista en el fútbol es el balón, y en la espiritualidad la emoción. Sin balón no hay juego y sin emoción no hay manera de experimentar el amor. Y a pesar de que en el fútbol haya equipos que ganen y otros pierdan, en la espiritualidad nadie pierde porque todos consiguen el objetivo final de recordarse en el amor.

 

En el fútbol las personas se reúnen para divertirse, y en la espiritualidad las almas se reúnen para experimentar el amor. Y créeme que no hay nada más divertido para un alma que experimentar y recordar el amor que ella es.

 

El fútbol es fútbol mientras haya juego, balón y gol. Y la espiritualidad lo es mientras el alma viva el juego que le permitirá experimentar las emociones con las cuales recordará el amor que ella es. Ambos son juegos y llegan a ser tan reales que olvidamos que lo son. Esta es la ilusión en la que vivimos y en la que olvidamos que nuestra única realidad es el amor.

 

En el fútbol hay dos equipos de jugadores que se enfrentan para hacer goles, y son los técnicos los que diseñan las estrategias para jugar los partidos y ganar. En la espiritualidad, son millones de almas reunidas alrededor de la experimentación del amor y es cada alma la que diseña su propio juego para reconocerse a ella misma. Y la cancha es el escenario en donde se reúnen los jugadores para jugar al fútbol, y la vida en donde se reúnen las almas para experimentar el amor.

 

En el fútbol, a pesar de que cada jugador tiene su posición, se alinea con el resto del equipo para maximizar su desempeño y alcanzar los resultados. En la espiritualidad, a pesar de que cada alma tiene su plan, hace pactos con otras almas para sacar máximo provecho de la experimentación del amor.

 

Por más de que el fútbol sea competitivo, no deja de ser un juego para divertirse. De hecho, cada jugador lo hace con entrega y pasión. Y lo mismo sucede con la espiritualidad, aunque es exigente y nos expone a todo tipo de situaciones, el alma disfruta de todas y cada una de estas experiencias y experimenta la alegría del ser cuando recuerda el amor que ella es.

 

Finalmente, el fútbol llega a otra dimensión cuando se practica el “fair play”, y la espiritualidad cuando la persona es compasiva, paciente y tolerante con las demás personas que la acompañan en este juego que cada uno eligió vivir.

 

En el amor que nos une, deseo que experimentes con pasión cada partido y cada situación que vives en tu vida cotidiana, y si quieres seguir disfrutando del mundial y de la espiritualidad consciente, sigue sintonizado en este canal “Yo Soy”.

 

Gabriel Francisco

COMENTARIOS (4)

15 junio 2018

Gloria Triviño

Francisco que excelente tema nos propones en esta reflexión a partir del sentimiento que genera un mundial de futbol y los elementos comunes con el amor. Siempre me ha parecido un fenómeno especial la pasión que genera un partido de futbol, y que cuando se obtiene un resultado favorable nos produce un éxtasis de felicidad, comparable a la sensación de eternidad. En especial cuando juega la selección de un país, es impresionante, todos unidos, sin distingo de raza, sexo o condición social, todos somos parte de la misma fuente, eleva el espíritu a su máxima expresión, olvidamos todo lo terrenal, produce embeleso y allí pienso nos lleva a experimentar el sentimiento más hermoso que es el amor y la alegría. Creo que eliges bien la conexión y es la emoción, el sentimiento que produce, el juego del balón y el juego del alma. En ambos casos lo hacemos a través de la ilusión. Me parece que existe una diferencia entre los dos juegos, en el fútbol, hay ganadores y perdedores, y nos has enseñado que eso no se da en el juego de vida, es cierto?.

15 junio 2018

Gabriel Francisco

Hola Gloria, has resumido bastante bien lo que son estos dos juegos y para responder a tu pregunta, yo hice mención de esta diferencia que tú anotas y cito textualmente lo que escribí en el artículo: "Y a pesar de que en el fútbol haya equipos que ganen y otros pierdan, en la espiritualidad nadie pierde porque todos consiguen el objetivo final de recordarse en el amor". Con esto me refiero a que ningún alma sale de la vida sin haber experimentado por lo menos algo del amor que ella es. Te mando un abrazo especial y muchas gracias por tus grandes aportes y maravillosas preguntas.

13 enero 2020

Alexia

Super interesante el aporte!!!

13 enero 2020

Gabriel Francisco

Saludos Alexia

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